La postura correcta, la delicadeza, la obediencia y el silencio han sido cargas históricas para las mujeres. Desde hace algunas décadas ha comenzado a vislumbrarse en el campo literario la masificación y revelación de las escrituras de mujeres, que tienen un lugar común: la emancipación, la liberación del pensamiento y la recuperación del cuerpo femenino. Volver a nosotras ha significado la renuncia a muchas de las categorías socialmente impuestas.
 
Soledad Luna nos propone una escritura versátil, en la que sitúa su ser mujer frente a los cuatro elementos de la naturaleza: agua, aire, tierra y fuego. Cada encuentro constituye un espacio íntimo donde cabe la introspección, la duda, el asombro, la sexualidad y la rebelión contra la herencia de un sistema violento y cargado de culpas.
La autora se mira desnuda, y en la construcción de sus versos piensa en todas las mujeres y su sitio en el mundo.
 
Daniela Sol
Editora